El 24 de julio, en el partido de ida ante Emelec, válido por los octavos de final de la Libertadores, Diego sufrió una grave lesión (fractura de tobillo izquierdo), tras ser derribado por detrás por un defensa contrario. En ella, jugada en formato triangular, perdieron sus dos encuentros por goleada frente a los promotores y los vascos del Athletic Club, camiseta del real madrid vencedor final. Otro hecho destacable se produjo el 23 de febrero de 1903, cuando el equipo madridista devolvió la visita para enfrentarse a los españolistas y que finalizó con un empate a cero.