El conjunto txuri urdin quedó englobado en el Grupo E junto al Manchester United, Sheriff y Omonia, y el debut fue ante el rival más duro del grupo y en su estadio: los red devils en Old Trafford. Pero en vez de ser un hándicap para los de Emery, que no entendieron la decisión del árbitro, sacaron todo su orgullo para darle la vuelta al encuentro en el último suspiro con un tanto de Jackson, olvidando así la goleada del Barça.